Desperté una mañana
y sentí el dulce aliento de la victoria;
atrás quedo el sacrificio eterno de las cosas
que pierden su valor cuando, después de compartirlas,
accedemos al estado febril de un sueño traidor.
Despertar es un hecho irreparable
que invade la paz del soñador;
soñar es una ilusión pasajera,
hermosa, rica en nutrientes,
que alimentan mi corazón dormido
y amanezco feliz cual soy.
Esta poesía está llena de mensajes positivos. Todos los días sale el Sol.
Todos los días se vuelve a nacer.
Y todos los días te da la oportunidad de ser mejor.
Es muy bonita.