Vida vacía de suspiros compartidos,
y dolor, en la distancia.
Distancia feroz de acechos constantes,
anclados, en tus ruegos.
Ruegos anhelantes de luz por la causa,
perdida, en tus entrañas.
Entrañas contritas de dolor,
acuciante, por la ausencia.
Ausencia de ti, de él, por ellos,
más allá, en vida.