Un paisaje en que encontrar
aquello que un día perdimos.
Un lugar en que guardar
los recuerdos que todo lo son.
Una casa en que vivir
los momentos más sinceros.
Una mesa en que sentar
un cariño y compartir.
Una cama en que dormir
intensamente un sueño.
Dos vidas para vivir
el color de la luz y, un beso.